El método STAR en entrevistas: cómo contar tu experiencia sin quedarte en blanco

Método STAR en las entrevistas de diseño

Hay un momento en casi todas las entrevistas de diseño, producto o tecnología que incomoda a cualquiera: cuando el entrevistador te pide que le cuentes un ejemplo real de tu experiencia.

No quieren tu pitch preparado del portfolio. Quieren una historia. Algo que muestre cómo piensas y cómo actúas en situaciones reales.

Ese es el terreno de las preguntas conductuales:

“Cuéntame una vez que tuviste que resolver un conflicto en el equipo.”
“Dame un ejemplo de un proyecto con un deadline imposible.”
«Cuéntame una vez que tuviste que defender una decisión de diseño.»

Y si en ese instante tu mente se queda en blanco o acabas dando vueltas sin llegar a ninguna conclusión, el resultado es frustrante. Para ti y para quien te escucha.

Aquí es donde entra el método STAR 🌟

Qué es el método STAR y por qué importa

Nunca me había planteado que existe un buen método para contestar a estas preguntas de las entrevistas hasta que afronté las entrevistas para entrar a trabajar en Twitter (en inglés, claro, algo que añadía más complejidad).

La persona que trabajaba en HR me recomendó que, para las siguientes entrevistas, me preparara muy bien dos o tres casos utilizando la estructura STAR. Yo no sabía de qué me hablaba.

👉🏼 STAR es un acrónimo que significa: Situación, Tarea, Acción y Resultado.

No es magia, ni un framework de consultoría que solo utilizan pocas personas. Es simplemente una forma de contar historias con un orden claro y coherente.

  • La Situación sirve para describir el contexto.
  • La Tarea define qué había en juego.
  • La Acción describe qué hiciste tú, no el equipo entero.
  • El Resultado muestra qué cambió gracias a esas acciones.

Lo interesante es que STAR no solo te ayuda a dar estructura tu respuesta. También te obliga a mostrar impacto, y eso es lo que diferencia a alguien que cuenta anécdotas de alguien que transmite valor.

Las 4 fases del método STAR en detalle

Sé que la teoría suena muy bien, y también sé que puede ser difícil saber qué decir si es una de las primeras veces que piensas en el método STAR.

A continuación te detallo las cuatro fases junto con ejemplos reales de lo que utilicé en la entrevista para entrar a trabajar en Twitter. Ya verás que no es nada excesivamente extenso, pero justo allí está la clave: es claro, conciso, y va al grano.

1. Situación: dar contexto sin enrollarse

Aquí explicas dónde estabas, qué proyecto era y por qué era relevante. La clave es no convertirlo en una novela: basta con que el entrevistador entienda el escenario. Ten en cuenta que no van a tener el mismo contexto que tú, porque no han trabajado en la misma empresa, no conocen las dinámicas, cómo se trabajaba, etc.

Ejemplo:

El primer proyecto que quiero compartir es la herramienta para «solicitar presupuesto».
La versión anterior, la que ves en pantalla, no funcionaba bien: los usuarios no entendían la interfaz, porque había campos que parecían deshabilitados, demasiado texto y un precio fijo de 93 € que todos veían, aunque no era real.

Algunas preguntas para preparar la Situación:

  • ¿Cuál era el contexto del proyecto?
  • ¿Quiénes estaban implicados?
  • ¿Con quién trabajabas?
  • ¿Qué lo hacía un reto?
  • ¿Qué había que cambiar?

2. Tarea: cuál era tu objetivo

Después de explicar el contexto, ahora es el momento de explicar qué hiciste, cómo enfocaste el proyecto, y qué responsabilidades tomaste.

Ejemplo:

Mi objetivo era rediseñar la herramienta para que fuera clara y fácil de usar, eliminando confusiones y aumentando la conversión.

Preguntas para practicar:

  • ¿Qué necesitaba lograr el equipo o la empresa?
  • ¿Cuál era tu rol exacto dentro del reto?
  • ¿Qué estaba en juego si no se conseguía?

3. Acción: lo que hiciste tú (no el equipo)

Esta es, sin lugar a dudas, la parte más importante. Es aquí cuando debes describir las decisiones y pasos que tomaste. Te recomiendo que hables en primera persona, lo hace más cercano y real.

Ejemplo

Simplifiqué la interfaz eliminando información innecesaria y trabajé en una propuesta que guiara mejor al usuario. Apliqué buenas prácticas en el diseño de interfaces y de experiencia de usuario, como el efecto Zeigarnik y progressive disclosure, para acompañar al usuario paso a paso en el proceso y simplificar todos los pasos.

Me coordiné con el equipo legal y con el de ventas para asegurar que los textos tuvieran la información necesaria, y con el equipo de desarrollo para garantizar un handoff claro.

Preguntas para practicar:

  • ¿Qué pasos seguiste para resolver el problema?
  • ¿Qué herramientas o métodos usaste?
  • ¿Cómo te aseguraste de implicar a las personas adecuadas?
  • ¿Qué decisiones tomaste que marcaron la diferencia?

4. Resultado: qué cambió

Y ahora llega el momento de cerrar tu discurso con un lacito, explicando qué impacto tuviste. Idealmente cuantitativo (números, porcentajes, tiempos). Pero si los datos no están disponibles, puedes utilizar información cualitativo (mejor relación en el equipo, menos fricción con usuarios, mayor claridad).

Ejemplo:

Con el nuevo diseño logramos aumentar en un 6 % la tasa de conversión de la herramienta. Esto permitió captar más clientes a través del canal online, que además es más escalable y menos costoso que el canal telefónico que se utilizaba antes.

Preguntas para practicar:

  • ¿Qué cambió a partir de ese resultado?
  • ¿Qué impacto tuvo en métricas, negocio o usuarios?
  • ¿Qué aprendiste de esa experiencia?

Un consejo: evitar sonar como un robot

Algo que sucede cuando empiezas a preparar respuestas para utilizar con el método STAR, es querer aprenderse de memoria las cuatro frases y recitarlas en orden.

Aunque esto hará que digas exactamente lo que querías decir, te hará sonar poco natural. Como ya te conté en el artículo sobre cómo trabajar en inglés, lo mejor es pensar en STAR como un guión de teatro: tú defines qué información clave quieres decir, pero improvisas los diálogos.

Sin lugar a dudas, lo más importante es lo de siempre: practicar. Cuanto más repitas tus historias, más naturales sonarán.

Por qué el método STAR es especialmente útil en diseño y producto

En este sector hablamos mucho de portafolios, de wireframes, de Figma… y, en general, de todas las habilidades técnicas.

Si has leído otros artículos de uiFromMars en el pasado, sabrás que las habilidades blandas son necesarias para crecer en tu carrera, y son las que te pueden ayudar a progresar más rápidamente de una posición junior a una senior.

El trabajo que hacemos implica, casi siempre, interactuar con otros equipo, negociar con ellos, y también hablar con nuestros usuarios. Nos dedicamos a entender cómo piensa y actúa la gente, qué necesidades tiene, qué objetivos quiere alcanzar. Las habilidades técnicas son importantes, pero casi siempre se da por sentado en una entrevista que ya sabes diseñar, por lo que la parte crucial es cómo te comunicas.

Apuntes finales

El método STAR no es una fórmula mágica que te servirá para que todas las entrevistas te vayan bien, pero sí una herramienta que te dará seguridad y claridad.

Y lo interesante es que no se limita a las entrevistas. También es útil en tu día a día:

  • Para resumir de forma clara lo que ha pasado a alguien más senior o a tu lead, sin tener que explicar meses de trabajo en una reunión de cinco horas.
  • Para presentar tu proyecto en un encuentro con personas de otras disciplinas que no conocen los detalles de diseño.

En resumen: STAR no es solo una técnica de entrevistas, sino una forma de contar historias con foco y sin ruido.

Y por cierto, si estás preparando una entrevista de empleo, es útil que revises las 18 preguntas para una entrevista de empleo de diseño 😉

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